La piel es uno de los órganos más importantes del cuerpo y el agua resulta esencial para que sus células funcionen correctamente. El agua también es sumamente importante para una adecuada hidratación de los órganos vitales como el cerebro que está compuesto por un 85% de agua.
Las gaseosas, las aguas saborizadas, infusiones, café, té, bebidas alcohólicas; no hidratan, por el contrario, crean mayor necesidad de agua para desintoxicar el organismo. Si cuando aparece la sensación de sed volvemos a beber bebidas “artificiales” o que necesitan digestión, estamos perpetuando un circuito tóxico.
Cuando el cuerpo esta deshidratado, la circulación a la superficie de la piel exterior se puede cerrar como medida de emergencia para que el agua no se evapore desde la superficie de la piel. Una deshidratación crónica envejece la piel prematuramente.
El agua regula la temperatura corporal, transporta los nutrientes, remueve las toxinas, mantiene el volumen sanguíneo, provee el medio para que se lleven a cabo las reacciones químicas celulares.
Comenzar el día tomando agua, es conectarnos con la vida y con la purificación (“Saucha”) .
En Japón es popular tomar agua a temperatura ambiente inmediatamente al levantarse por la mañana. Luego, esperar 30 minutos para desayunar. Este tratamiento tiene éxito para disminuir los dolores de cabeza, cansancio, digestivos, constipación e infecciones. Además, beneficia la piel, el humor, la energía, el movimiento intestinal y la vista.
El Agua es una fuente de Prana, de energía vital. Para el yoga no solo nos hidrata, nos conecta con el origen, con el inicio de la vida, con el elemento que nos contuvo durante nueve meses.
Nancy Nakazato
Instructora de Yoga. Psicóloga
Creadora del Método Nancy Nakazato Yoga